miércoles, 30 de septiembre de 2009

MARARÍA de Rafael Arozarena


LA NOVELA MARARIA





Ésta tiene un antecedente, un romance titulado María la de Femés, correspondiente al libro A la sombra de los cuervos. De esta novela se han publicado tres ediciones, se ha hecho una adaptación y representación teatral y se prepara un guión cinematográfico.


Titulo.- Mararía es la suma de Mara y María. Mara es un personaje que sé autoquema para salvarse de D.Bartolo y mantenerse pura; Mararía, personaje central de la novela, también sé autoimmola. Manolo Torres Stinga establece una analogía entre Mararía y la isla de Lanzarote, autodestruida y purificada por el fuego de sus volcanes. Se da además una analogía "mujer" = "isla".


Argumento.- Un visitante llega a Arrecife y permanece a la espera del camión de Pedro el Geito para pedirle que lo traslade a Femés. En este pueblo vive Mararía quien, vieja y cansada, deambula errática por el pueblo. Ha llegado a alcanzar la fama de bruja. En su juventud María fue una mujer bellísima a quienes pretenden los del pueblo y los forasteros. Son estos personajes los encargados de construir para el visitante, narrador en el tiempo presente, la vida de María y su relación con ésta en el pasado.


Técnica de composición.- Punto de vista narrativo.- La narración viene dada por un autor narrador que narra en 1ª persona: (...) "Me habían descrito al hombre" (...) y, varios personajes narradores que lo hacen en 3ª persona: (...) "Pero no ocurrió nada de lo que esperábamos, no señor. Del cuerpo de Jesusito no se encontró ni rastro" con la excepción del Señor Alfonso, el cartero, quien lo hace en 3ª y 1ª: (...) "De pronto se me oprimía el corazón al recordar lo pobre que regresaba"(...).


Espacio.- La obra se desarrolla en Lanzarote principalmente en el pueblo de Femés, y en otros pueblos de la isla. Las primeras referencias que se nos da de una situación concreta es la del camión de Pedro el Geito, internándose por toda la isla: (...) " Un hombre que lo metía todo en un camión y lo llevaba isla adentro, a los pueblos, a Tías, a Yaiza, Uga, Haría" (...). Existen además, otros espacios concretos pero que tienen que ver con "lo misterioso", con "el realismo mágico". Éstos son La piedra negra, La Bahía de los Ahogados, La palmera de Tinazor...


Tiempo.- La narración se estructura en torno a un tiempo presente y a un tiempo pasado. El tiempo presente coincidente con la vejez de María y con el momento de las confidencias y narraciones de los distintos personajes. Es "el tiempo de la narración" momento en que la historia es contada al autor narrador por los distintos personajes, y a su través al lector". Tiempo pasado coincidente con la Juventud de María. Es "el tiempo de la ficción": se narra la anécdota, la historia. Uno y otro tiempo se alternan. La secuencia narrativa situada en el tiempo presente sigue, sin embargo, una disposición lineal, que se inicia con el traslado del autor-narrador en el camión de Pedro al pueblo de Femés y termina con la muerte de María. Cabe señalar la frecuencia de prolepsis, figura estilística a través de la cual se anticipan hechos, "el pueblo está maldito y ocurren cosas"(...).


Personajes.- El personaje "eje o nuclear "es María-Mararía. El resto de personajes gravitan en torno a ella. Tal es el caso de Manuel Quintero, Pedro el Geito, Isidro, Sebastián, Don Abel y Fermín: todos ellos unido a María por lazos afectivoeróticos, con la excepción de Marcial y D.Abel que son además apoyo físico y psíquico de María. Manolo Torres Stinga establece una diferenciación de rasgos en estos personajes. Así habla de rasgos uniformadores y rasgos singularizados.


Rasgos uniformadores.- Son rasgos ambientales, de orden sociocultural y ético, que condicionan el clima general de la novela y la actuación de sus personajes. Son personajes transidos de soledad como es el caso de Marcial, Señor Alfonso, Isidro... personajes además inactivos y sujetos al fatalismo.


Rasgos singularizados.- Son rasgos diferenciales merced a los cuales cada personaje presenta una concreta línea de conducta, que justifica su funcionalidad narrativa. Mararía y su rebeldía es muestra de este tipo de rasgos.


Otros aspectos.- En lo que a los personajes se refiere es la oposición que se da entre los personajes del pueblo y los forasteros. Los primeros son rechazados por María; así Pedro, Isidro, Alfonso, representan el desdén absoluto de María, (Marcial es aceptado en tanto ayuda a Jesusito, el hijo de María, una vez muerto éste la relación cambia). Los segundos son aceptados por María; así Manuel Quintero, el moro y Don Fermín representan la aceptación de María.


Personajes secundarios.- María es el eje de todos los personajes. Encarna el prototipo de la soledad y de la tristeza: "María es larga y seca como la isla de Lanzarote "; para muchos es la suma de " ángel y demonio" "Aquella mujer que nunca supe si era ángel o diablo". Existe una simbiosis entre "María-mujer " y María-isla": La isla es como una mujer. Tiene su fertilidad y hay que defenderla del diablo. "Mararía representa a Lanzarote, la historia de una isla salvaje y esquiva que atrae a sus hombres, sin que éstos se vean compensados por ella.


María es un personaje real. El propio Arozarena la conoció ya mayor, durante su estancia como funcionario de telégrafos en Lanzarote. Confiesa haberse quedado impresionado por aquella y de ello deja constancia en la obra: (...)"Tal negro ciprés. Amada tea o cuervo en vertical la vieja permaneció allí plantada un buen rato... Pero en la parte alta de aquel árbol requemado, algo surgía incandescente aun; algo como una brasa encendida surgía de aquellos ojos negros, árabes, jóvenes y hermosos."


La estructura.- Es "abierta" pues al final aparece una niña posible futura bruja a quien las demás también le cantan el "¡ vuela, vuela, Mararía / que ya está muriendo el día¡". Desde un punto de vista formal predomina "la narración": los hechos vienen dados por quien los cuenta o rememora. Pero es una narración cargada de «Monólogos", dado que la historia va siendo contada sucesivamente por diversos personajes-protagonistas, quienes a su vez son narradores secundarios, reduciendo al narrador primario (el visitante que narra en 1ª persona) a mudo testigo receptor de la historia. Se habla de monólogo en tanto en cuanto los personajes narran sus vivencias con María en un tiempo presente y con el pasado como recuerdo. Por eso hablan casi para sí mismos. El diálogo entre ellos, como habitantes del pueblo no existe. Esto hace abundar más el sentido de soledad y aislamiento de los mismos. Excepcionalmente se usa "el diálogo": confrontación verbal entre dos personajes", en la casa del médico y del cura; esto se debe al carácter reflexivo de éstos. Pero además abundan "las descripciones", éstas suelen ir de lo general a lo particular: (...) "Me habían descrito al hombre, un hombre. Un hombre que se llamaba Pedro, Pedro el Geito". (...) Siendo muy importantes las utilizadas para describir el paisaje: (...) "el cielo era del color de la amatista, último color de la sangre". (...)Señalamos al principio que en Mararía existían bastantes reminiscencias líricas; de ahí la abundancia de figuras estilísticas entre las que destacan:


Metaforización prosopopéyica.- Se le da vida a las cosas: (...) "Un camión que tosía, escupía, jadeaba. Un motor agotado enfermo de nervios, de rabia, de sed. Un motor que nunca terminaría de morir (...), pero también al paisaje: (...) "Tenía la isla una muerte dulce, lenta y animal, como si se hubiese cortado las venas(...). Es más, se le llega a dar a las personas la vida del paisaje de la naturaleza: (...) " Es una isla sola desamparada, como yo mismo, como un barco a la deriva".


Cromatismo.- Numerosas veces se acude al color para reflejar el estado de lo que se percibe: (...) " El sol tocaba ahora el borde de las colinas y la llama adquiría un tinte rojo, encendido, como de fuego"(...).


Comparación.- Es ésta una de las figuras más frecuentes: (...) " Y unos pies descalzos y llenos de arrugas como las tierras de un malpaís ".


Enumeración.- Figura retórica que consiste en enumerar rápidamente varias ideas, personas o cosas. (...) "Señor Sebastián es principal por ser alcalde. Luego está Isidro, que es el dueño de la venta. Señor Alfonso, que sabe leer, y marcial el Jorobadito."


Hipérbole.- Figura usada con frecuencia por los personajes narradores, por los que han tenido contacto con María: (...) "Y alzando la guitarra con las dos manos le dio tan fuerte leñazo en la cabeza que el árabe no pudo decir ni pío". "Una muchacha que andaba entonces por los veintitantos años. Delgada como un tallo de trigo."


Ironía.- El tono sarcástico y burlesco se emplea mucho al referirse sobre todo a Marcial, el jorobado. (...) "Luego se alejaron Marcial y el camello en dirección a Uga y hacían buena pareja los dos, con la misma calma con igual desgracia a sus espaldas".


Léxico.- Aparecen bastantes términos propios del habla canaria, tales como: "pejines", "belingo", "cristiano", "rebatiña", "guayabera", "ventorrillo", "Jeito" o "geito", "roña"... Citados los aspectos formales más significativos, cabe destacar unas señalizaciones respecto a aspectos sociológicos como: la marginación y la soledad, la pobreza económica, y la emigración tanto a Venezuela como a Cuba; en este caso a Cuba": Sólo me traje un hatillo con un poco de ropa sucia, unos pantalones viejos y una camisa que allá en Cuba llamamos guayabera".


BIOGRAFÍA DE RAFAEL AROZARENA DOBLADO.

Rafael Arozarena Doblado, poeta y narrador, nace en Santa Cruz de Tenerife en 1923. Sus primeros contactos literarios se producen con escritores de la generación anterior como Víctor Zurita o Víctor Galtier. Pero al integrarse en el grupo fetasiano sus posturas se radicalizan. El grupo fetasiano lo integran Isaac de Vega, Antonio Bermejo, Francisco Pimentel, Juan Antonio Padrón y el propio Rafael Arozarena. Todos ellos apuestan por una literatura de lo Onírico (sueño) y lo simbólico; el propio término FETASA es una palabra que deliberadamente no quería significar nada y que Isaac de Vega usará como título de su más conocida novela. Ideológicamente defienden una especie de filosofía vital o de religión sin sacralizar, pues de todo ello tenía algo. Más que un movimiento artístico literario propiamente dicho, era el desarrollo de un estado de ánimo real, en el cual la emotividad toma un pensamiento no muy puro, casi alegórico, irracional, y desenvuelve, en una metamorfosis. Actitud vital en la que influyen las circunstancias históricas y culturales del tiempo, pero asumidos desde la marginalidad insular, desde la soledad que históricamente había escamoteado al insular el arraigo suficiente para estar seguro de su identidad. En Arozarena se percibirán las influencias de otros autores canarios como P. García Cabrera, Agustín Espinosa y Emeterio Gutiérrez Arbelo. A ello se le han de sumar la influencia de autores como Walt Whitman, Rainer María Rilke, Salvatore Quasimodo, Giuseppe Ungaretti, Ezra Pound.


OBRA.- Como poeta escribe Romancero Canario (1946), A la sombra de los cuervos (1947). Altos crecen los cardos (1959). Aprisa cantan los gallos(1964), El ómnibus pintado con cerezas (1971). Silbato de tinta amarilla (1977), Desfile otoñal de los obispos licenciosos (1985). Como narrador escribe las novelas Mararía (1973 y 1982) y Cerveza de grano rojo (1984), además de abundantes narraciones en periódicos y revistas insulares.


Fue colaborador del suplemento literario "Gaceta Semanal de las Artes. En 1980 obtiene junto con Isaac de Vega el Premio Canarias de Literatura.


Cabria señalar por último, el hecho de que Arozarena manifiesta que para él novela y poesía son dos manifestaciones polares de escritura. La poesía se encarga de encubrir al hombre "disminuido ante cualquier interrogación severa"; su escenario, al decir del autor, es la tierra. "El poeta pretende/ como el pájaro egipcio / que la vida renazca / de sus propias cenizas. « De su concepto de novela proceden las ideas de que ente género aporta soluciones, de que da la medida del intelecto al aprisionar la realidad dentro de una lógica, y que es la modalidad que conviene para dar cabida al tema del mar. Pese a esta diferenciación es claro que en Mararía aborda la tarea de una narración larga pero con ciertas reminiscencias líricas.


Rafael Arozarena falleció hoy 30 de setiembre de 2009 a la edad de 86 años.

Fuente:

                      http://www.gobiernodecanarias.org/educacion

Melan

3 comentarios:

  1. Hola Melan, que maravilla lo que publicas, no puedo dejar de sorprenderme ante la selección que haces de las obras literarias, que ilustran mi pequeño pero ansioso mundo. Tienes un don especial y gracias por la bondad que tienes al compartir estas luces y tus orientaciones en el mágico mundo de la literatura. Igualmente he pasado por tus otros blogs y he quedado cautivada. Agradezco cada uno de los sensibles comentarios que has dejado en mi blog, he venido acá a dejarte algunos, pero no se insertan. Que tengas una linda semana. Cariños

    ResponderEliminar
  2. Gracias Circe, me alegra mucho que te guste la selección que hago, y nos identificamos porque es lo que más me gusta leer a mí también. Sobre los otros blogs, bueno, es un poco de todo, algunos son mejores otros no tanto lo reconozco, lo fundamental es que me hace bien llevarlos, encontré en la blogósfera un buen lugar para reencontrarme con sueños que consideraba perdidos. Un abrazo.

    ResponderEliminar